Recién leí este artículo:
Politicam excrementum por Alma Delia Murillo
¿Cómo explicar esa realidad? ¿De dónde proviene y cómo llegó esto a ser de esta manera? ¿Podría ser diferente o lo rige algún tipo de ley sociológica inevitable? No lo sé. Si la cultura funciona como una granja, entonces los especímenes aludidos en ese artículo tan sólo son resultado de algún tipo de crianza. En un sentido, así los hemos formado a través de nuestra propia cultura pues no aparecieron de repente desde otra dimensión ni de otro universo, sino de nuestros hogares, de nuestras escuelas y de nuestros barrios e instituciones.
Por ejemplo, a la ciencia y al arte de cultivar flores se le dice floricultura, si uno busca la flor mejor cultivada, entonces pregunto a los floricultores. Si buscara al cerdo con los mejores atributos, me acerco a los porcicultores. ¿Con quiénes me acerco si busco al humano mejor desarrollado —si acaso eso existe—? ¿Cómo se le dice a la ciencia y al arte de cultivar humanos? Hasta donde alcanzo a ver, no hay una respuesta única, simple o “práctica" sino un complejo conglomerado del que soy una pequeña parte; sin embargo, quizá un rasgo para encontrar a ese cultor está en el hábito de reexaminar el origen de mis propias ideas y opiniones, pues yo mismo soy un resultado de la granja de la cultura humana y mis cultivadores han hecho lo que han podido y quizá con buenas intenciones, pero no ha sido suficiente. Ese buscado cultor es quien decide emprender su propio cultivo al retornar de continuo a los básicos de la historia, del arte, de la ciencia y de la filosofía más elemental: reconocer y luego cuestionar mis supuestos. ¿Tiene sentido?
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