Es dócil, es obediente, es resignado y sumiso, no piensa mucho, nunca hace preguntas incómodas, jamás cuestiona lo dictado por las figuras de autoridad, nunca confronta y siempre pone al respeto como excusa, tiene confianza absoluta en que seguir con toda fidelidad la opinión ortodoxa es lo mejor y más positivo, tiene certeza en que las soluciones ya están en manos de un orden superior y en sus manos sólo está confiar y seguir el trayecto trazado para sí por dicho orden superior, tiene muy claras sus prioridades y siempre se orienta por el reconocimiento en primer lugar y toma al conocimiento como algo opcional, se considera a sí mismo, o al más popular o reconocido, como un modelo de excelencia para la emulación de los demás, etc.
Si esos rasgos describen al producto empaquetado y comercializable que sale de las líneas de producción de instituciones académicas, entonces se entiende por qué algunos dicen que la educación, cual Mesías, algún día llegará, de quién sabe dónde, y nos salvará de nuestra propia insuficiencia e impericia.
¿Será acaso que el lugar de esa educación salvífica está hoy usurpado por una educación de meras apariencias y simulaciones? ¿Acaso la filosofía, como estrategia general de auto-reeducación, ha muerto en nuestras sociedades?
Education Is a System of Indoctrination of the Young - Noam Chomsky
No comments:
Post a Comment